viernes, 29 de marzo de 2024

Sin Certezas [La historia del estrangulador de Boston]
Desde la llegada del siglo XXI el tema de los asesinos múltiples se volvió parte de la cultura popular. El afán de esto, ha sido llegar a comprender cómo aquellos depredadores humanos llegaron a convertirse en homicidas despiadados y ser capaces de realizar tan macabros crímenes; sin embargo existen historias que a veces no cuajan del todo y que ofrecen innumerables dudas, y la del estrangulador de Boston es una de ellas. Lo que dice el archivo es lo siguiente: durante la década de los sesenta se produjo la muerte de trece mujeres en la ciudad de Boston, quienes fueron violadas y maniatadas supuestamente por el mismo hombre, pero la realidad no soporta del todo esta teoría ya que para muchos existían pruebas concluyentes que indicaban lo contrario y que suponían que el asesino de Boston era en realidad más de uno. Debido a estas dudas es que la policía de aquellos días tuvo la investigación del caso abierta hasta el año 2013, año en que según la ley se consiguió una prueba concluyente para dar el caso por cerrado. Los primeros cuatro asesinatos se produjeron en junio de 1962 y fue la prensa escrita y no la policía quien apresuro la investigación. El rango de edad de las víctimas iba desde los 19 a los 84 años, por lo que muchos creyeron como imposible avalar la tesis de un asesino único debido al rango etario tan disímil de las víctimas. Todas las asesinadas eran mujeres solteras con o sin hijos y que vivían solas, y todas fueron estranguladas con una media de seda o una cuerda que luego era atada por el victimario con un lazo. El perpetrador no forzaba las entradas y se hacía pasar por repartidor u hombre de mantenimiento del edificio, para así ganar la confianza de sus víctimas. Hasta octubre de 1964 no había sospechosos, año en que la policía arrestó a Albert DeSalvo por intentar violar a una mujer dentro de su residencia. Albert DeSalvo confesó los crímenes, pero su perfil de mentiroso compulsivo y su esquizofrenia cubrieron la investigación de un manto de dudas. La policía no pudo vincular a DeSalvo con los crímenes ya que no había evidencia para hacerlo, por esta razón fue juzgado por crímenes de violación efectuados antes de 1962 y por delitos de robo pero no por asesinato. En1967 fue sentenciado a cadena perpetua y en febrero de ese mismo año escapó de la cárcel junto a otros dos presidiarios entregándose tres días después. Este acontecimiento provocó que lo derivaran a una cárcel de alta seguridad en donde seis años después otro reo le quitaría la vida. Si bien eran pocos los que creían en la confesión de DeSalvo para la policía era más que suficiente; sin embargo los doctores de DeSalvo creían que el ánimo del sujeto era solo llamar la atención del mundo ya que siempre quiso ser un afamado escritor. En una ocasión un ex perfilador del FBI señalo que “era inconcebible a nivel de su comportamiento que todos estos asesinatos pudiesen encajar en un solo individuo.” En el año 2000 un abogado comenzó una nueva arista del caso al pedir la exhumación de los cuerpos de Mary Sullivan y de DeSalvo para realizarles pruebas de A,D,N, la policía de Boston declaro que las muestras coincidían, pero en la comunidad local quedaron muchas dudas sobre la veracidad del procedimiento efectuados y muchos lo declararon falso y manipulado. A pesar de estas interrogantes la policía estableció en conferencia de prensa que no existía duda alguna que en el cuerpo de Mary Sullivan se había encontrado semen de DeSalvo y que esto corroboraría la tesis sobre la culpabilidad del mismo en los otros doce asesinatos. Dejando esta situación en status quo y antes de proseguir, sería bueno echar un vistazo a los datos de DeSalvo antes de convertirse en un asesino múltiple si es que de verdad alguna vez lo fue. Albert Henry DeSalvo nació el 3 de septiembre de 1931 y falleció el 25 de noviembre de 1973 en una cárcel norteamericana asesinado por otro convicto quien le propinó severas puñaladas hasta acabar con su vida. Hijo de un padre golpeador que llegó a sacarle los dientes a su mujer y a su hermana, infringís constantes torturas a toda su familia como por ejemplo quebrarles los dedos de las manos. El padre de DeSalvo llevaba prostitutas a su casa y obligaba a mirar a sus hijos mientras tenía sexo con ellas con horribles perversiones. Según los datos encontrados en las fichas médicas y policiales de Albert DeSalvo el niño comenzó desde temprana edad a torturar animales y a robar cruzando constantemente los límites de la ley.
En su temprana adolescencia fue vendido como esclavo junto con su hermano a un agricultor de Pittsburg y al escapar volvió a la casa familiar en donde su padre le enseño a robar. Ya más adolescente fue ingresado al ejército en donde fue dado de alta con honores. Antes de ser acusado o imputado por las trece muertes de mujeres en Boston, DeSalvo ya poseía un prontuario por violación y abuso sexual siendo su modus operandi ingresar a las casas de las víctimas que por lo general eran jóvenes y bellas, y ofrecerles un contrato para modelar en una supuesta agencia publicitaria; allí las medía y las manoseaba y a veces consumaba sus fechorías, siendo bajo esta mecánica como fue descubierto y condenado a la cárcel por un tiempo acotado por aquellos años; sin embargo hasta aquí no habían muertes. Los crímenes comenzaron desde el 14 de junio de 1962 y concluyeron hacia el cuatro de enero de 1964. Las víctimas fueron estranguladas con prendas de su propia ropa. Según retratan las crónicas de la época DeSalvo incluso fue inducido por hipnosis para poder recordar datos sobre lo sucedido durante los asesinatos, pero estas sesiones no fueron del todo concluyentes, ya que si bien recordó cosas, todo lo que dijo durante aquellas terapias ya había sido revelado por los periódicos y la televisión de una u otra manera. Otra arista importante del caso y que a la vez es la más inquietante es su relación con su compañero de celda en la cárcel, George Nassar, según este último DeSalvo le confesó la ejecución de las trece mujeres, sin embargo se cree que Nassar extorsionó a DeSalvo y manipuló su declaración con el fin de conseguir dinero. Se cuenta que uno de los más influyentes directores de la policía de aquel tiempo y cabecilla de la investigación, había prometido a DeSalvo 10.000 dólares por el nombre de cada víctima que pudiese dar bajo confesión firmada y debido a esto Nassar estuvo lavándole el cerebro a DeSalvo para que confesara los crímenes con la mayor veracidad posible y así luego quedarse con la recompensa. Otro aspecto curioso e inverosímil de la historia fue el ofrecimiento por parte de la policía de un contrato para que DeSalvo publicase un libro con todos los detalles de los asesinatos. DeSalvo que amaba el ser reconocido puso todas sus esperanzas en esto ya que él pensaba que por fin sería famoso y reconocido a través de este medio. Cuando DeSalvo comprendió que la promesa policiaca no se efectuaría, comenzó a llamar a los medios de comunicación desde la cárcel para contar su verdad pero pronto fue asesinado por un compañero de celda, se dice que por vender anfetaminas a un precio más elevado de los que permitía el mercado de la cárcel. DeSalvo se retractó en más de una ocasión de sus confesiones pero para aquel momento ya era considerado el principal culpable de los hechos establecidos anteriormente. Su asesino, Robert Wilson, fue llevado a juicio pero salió sobreseído debido a que no se encontraron pruebas suficientes en su contra dentro del gran jurado. Muchos especialistas en materias forenses han encontrado demasiadas inconsistencias en las palabras de DeSalvo que siempre presentó dudas y debilidades en sus relatos sobre los acontecimientos. La escritora Susan Kelly encontró algunas evidencias que exculparían a DeSalvo de los crímenes o que por lo menos harían dudar a cualquier jurado de su culpabilidad. Otra de las hipótesis que se barajó fue que el propio Alfred Nassar fue el asesino de las trece mujeres y que se escudó en DeSalvo para nunca ser vinculado a los atroces hechos. Nassar era un misógino violento y psicótico que ya tenía un par de asesinatos a su haber y que finalmente fu condenado a cadena perpetua por hechos acontecidos a finales de la década de los cuarenta. Daniel Marsh fue oro sospechoso, un estudiante de Harvard y ex novio de una de las víctimas, en específico de Mary Sullivan, la última de las asesinadas por el estrangulador. Daniel Marsh fue juzgado y encarcelado por otros crímenes pero no por los asesinatos que recayeron sobre el sospechoso principal, DeSalvo, aun cuando había muchísimas dudas sobre si el asesino era sólo uno o eran varios. Lo que más confundía a los especialistas es que el asesino rompía sus patrones de conducta al elegir sus víctimas, algunas de las mujeres asesinadas tenían entre 55 y 85 años mientras que el otro grupo eran mujeres de 19 a 23 y esto era bastante desconcertante para los que sabían de estas materias, ahora bien, es importante destacar que las investigaciones sobre los asesinos en serie estaban en ciernes en los Estados Unidos siendo el caso de DeSalvo la primera gran investigación sobre uno de ellos. En los próximos años aparecerían una serie de casos en América que elevarían las investigaciones respecto a este tipo de individuos con los casos del hijo de Sam, Charles Manson entre muchos otros. Otra de las grandes dudas que dejó el caso DeSalvo fue que algunas víctimas estaban boca abajo y otras boca arriba y que en algunos casos el asesino robaba y en otras no. Todo esto dejó el caso en una constante confusión ya que para muchos era imposible que un asesino de esas características cambiase su modus operandi de esta manera. A pesar de esto el único inculpado sobre los crímenes hasta el día de hoy sigue siendo DeSalvo.